Ana Cecilia Rojas, ex gerenta y ex directora de proyectos de innovación ejecutados por Codesser en la región de Arica y Parinacota, nos cuenta cómo fue el trabajo que se hizo con más de 20 personas que reciclaban residuos domiciliarios para transformarse en recicladores de base y ser piezas clave en el avance para ser una región más sustentable.

Muchos de ellos son personas que vivían en situación de calle, y que hoy forman parte de una cooperativa y tienen un certificado de reciclador de base, un trabajo que sin duda da dignidad y donde Codesser cumple una labor de responsabilidad social en el territorio.

Cómo se hizo esto y cómo replicarlo: aquí los detalles.

  • ¿En qué consistió el proyecto de Recicladores Base en Arica?

El proyecto de modelo de gestión para la integración de los recicladores de base de Arica fue uno de los primeros proyectos de innovación social que se ejecutaron en la región de Arica y Parinacota.

Codesser, a partir de un equipo de profesionales, identifica metodologías de trabajo para entregar herramientas de competencia a los recicladores de base que les permiten estar en condiciones para optar a la certificación de competencias laborales de recicladores de base.

Nos dimos cuenta de que la mayoría de los recicladores de base eran personas en situación de calle, que no iban a cumplir y que no tenían ninguna posibilidad desde su propia motivación cumplir los requerimientos de la certificación. Con la ley 20.920 vigente ellos no iban a poder recolectar residuos. Con nuestra experiencia y con la llegada del instrumento de innovación social de Corfo presentamos este modelo de gestión y logramos elaborar diferente material que nos permitió trabajar con el levantamiento de los recicladores de base y por otro lado, a partir del perfil, elaborar sistemas de trabajo donde los recicladores pudieran obtener la certificación, cosa que sucedió porque se articuló con el movimiento nacional de recicladores de base y por lo menos 25 de nuestros recicladores certificaron y hoy día cuentan con la certificación de competencias laborales.

  • ¿Cómo surgió la idea y por qué?

Entre Claudia Monsalve y yo, quienes hemos estado trabajando en Codesser en el ámbito residuos, en este transcurrir de los proyectos que tenían enfoque en las empresas como la mayoría de los proyectos Corfo nos dimos cuenta del rol que tenía el reciclador de base.

La recolección domiciliaria tiene que estar articulada con recicladores de base que son las personas que hacen el retiro casa a casa y que tienden a generar mayor cobertura en el territorio. Y ahí centramos la mirada sin tener en ninguno de los instrumentos anteriores compromiso de indicadores respecto del levantamiento de recicladores.

Lo hicimos porque consideramos que era necesario. Ahí nos acercamos y conocimos a un grupo de aproximadamente 25 personas. Los identificamos, nos dimos cuenta de que comían en comedores sociales, y ahí nos surgió la necesidad de buscar alguna alternativa que permitiera trabajar con ellos y aportar a su mejor calidad de vida.

Y luego aparece el instrumento de innovación social que era ideal para cubrir ese espacio, entendiendo que Codesser lo que hace es una labor de responsabilidad social en el territorio.

  • ¿Cómo sigue funcionando ese proyecto hoy?

Ese proyecto nos permitió a nosotros aportar a cohesionar a un grupo de recicladores de base. Ellos se han ido articulando con otras iniciativas, de formación, participaron en algunos proyectos de prevención del covid durante la pandemia. Lograron constituirse como una cooperativa, hoy día tienen una personalidad jurídica y de esa manera organizada, ellos están aspirando a poder articularse un modelo de gestión donde los incluyan, donde sean visibilizados y donde su opinión sea tomada en cuenta.

También pudieron articularse con el movimiento nacional de recicladores de base, de hecho, una participante de este grupo participó en un congreso el año 2019. Logramos su visibilización, su cohesión ir difundiendo el rol de los recicladores de base de Arica.

Cuando hicimos análisis de relevancia, uno de los temas más importantes a los que aspiran un reciclador de base es el reconocimiento y la mirada de otorgarle dignidad al trabajo que hacen. Ellos tienen todas las ganas de hacer un trabajo mejor, y no rastrear en la basura, sino que aspirar a un modelo de entrega, como dicen ellos: “mirándose a los ojos entre el generador domiciliario y el reciclador de base”, porque entienden que hoy día contribuyen. Aportamos a cambiar la mirada y a dignificar el rol que tienen hoy día.

Ya no son cachureros, son recicladores de base.

  • ¿Cuál fue el aporte de Codesser?

Codesser era el beneficiario, aportó con sus horas profesionales, toda su experiencia, el soporte contable y todos los recursos logísticos con los que cuenta un agenta operador.

  • ¿Es un proyecto replicable en otros lados?

Sin duda es un proyecto replicable en cualquier otra región del país, de hecho, ese era un plus que tenía y por eso lo evaluaron bien en Corfo, porque lo que es el reciclaje están concentrado principalmente en las grandes ciudades, principalmente en la Metropolitana, en el Biobío.

Entonces los modelos de levantamiento de recicladores de base a nivel regional y cómo trabajar con ellos cuando son personas en situación de calle o con escazas competencias técnicas del área, se puede desarrollar y trabajar. Esto aporta muchísimo a la implementación de la ley 20.920 y que sea un poco más democrática y descentralizada.

  • ¿Qué importancia se le da en Arica a los temas de economía circular?

Como toda región de Chile, la economía circular hoy día está partiendo como tema, y eso significa que está en un proceso de introducción. Yo creo que quienes tienen mayor nivel de conciencia son las personas, los habitantes, a partir de lo que conocen de reciclaje en términos generales.

Estamos a más de 2 mil kilómetros de Santiago y de los centros transformadores, y cada camión cuesta al menos entre $1.200.000 y $1.500.000, entonces empieza a surgir la lógica de buscar soluciones locales y ahí es donde la orientación de las instituciones de fomento permite al empresariado pensar en innovación en el ámbito de economía circular. Yo creo que en la medida en que se vaya visibilizando va a prender mucho más esta nueva mirada de construcción y de gestión de residuos.

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