Desde febrero de 2024, que Codesser es el agente operador de este programa financiado por Corfo a través de su programa de Formación de Capital Humano (PFC). Un programa que tiene al Ministerio de Energía como colaborador.

La inestabilidad y el aumento de los costos de combustibles fósiles, los problemas de contaminación ambiental y la búsqueda de energías renovables conforman un desafío presente en muchos países del mundo.

Es por esta razón, como explica Fabiola Rivera, ejecutiva de Desarrollo Empresarial de Codesser región Metropolitana, que ha surgido con más fuerza el posicionamiento del rol que la bioenergía puede cumplir en una matriz energética diversificada y más limpia.

Como señala Fabiola, según datos de INFOR, al 2020, en el sector eléctrico a nivel mundial la bioenergía era la tercera fuente de energía renovable, mientras que el sector forestal tomaba un lugar clave para el suministro de biomasa, representando el 87% del suministro total (leña, residuos de la industria de la madera, madera recuperada, carbón vegetal, entre otros).

De manera adicional, el sector de la bioenergía ha empleado hasta el 2020 a 2,8 millones de personas a nivel mundial, sin contar los empleos en el sector tradicional de la biomasa. Por último, es pertinente señalar que la Agencia Internacional de Energía ha desarrollado diversos proyectos sobre biomasa, llegando a estimar que el 10% de la energía primaria mundial procede de recursos asociados a la bioenergía, incluidos los relacionados con biocombustibles líquidos y biogás (INFOR, 2020).

“Chile es un país rico en recursos energéticos renovables, lo que le ha permitido posicionarse como uno de los países lideres en el mundo en la implementación de medidas de mitigación y adaptación ante la crisis climática y le ha permitido también sortear crisis de seguridad energética derivadas de los vaivenes del mercado internacional de los combustibles fósiles” afirma Fabiola y añade: “En este contexto, dado el gran desarrollo que ha experimentado el sector silvoagropecuario de Chile en las últimas décadas, la biomasa es un recurso energético local renovable muy importante, cuyas proyecciones de crecimiento se ven auspiciosas dadas las contribuciones que puede llegar a hacer en el ámbito de combatir la crisis climática y el futuro escenario de crecientes restricciones a la utilización de carbón y derivados del petróleo”.

En este contexto, Codesser es el agente operador del proyecto Identificación y cuantificación de brechas de Capital Humano en el mercado de la biomasa como fuente de energía en Chile,

el cual tiene como objetivo general determinar las necesidades de capital humano en la cadena de valor de la biomasa para uso térmico en las regiones del centro sur del país desde la región de Valparaíso hasta la región de Magallanes.

Entre sus objetivos específicos se encuentra el caracterizar al sector y subsectores en materia de capital humano, la cadena de valor y un análisis comparativo con otros países de la formación en el sector; levantar las brechas de capital humano relevantes que afectan el óptimo desempeño la cadena de valor del sector y proponer un plan de acción de cierre de brechas capital humano y realizar recomendaciones de implementación.

Como cuenta Fabiola Rivera, ejecutiva de Desarrollo Empresarial de la región Metropolitana, ya son más de siete meses de ejecución del Programa, y el primer objetivo específico, ya se encuentra realizado. Actualmente el segundo objetivo está en proceso.

“La capacitación y formación de capital humano en energía constituye una condición habilitante para el desarrollo energético sustentable del país por lo que es urgente acelerar la vinculación entre la oferta de las instituciones formativas con los requerimientos de la industria a través de la estandarización de los conocimientos, habilidades y competencias que se enseñan en las distintas especializaciones”, afirma Fabiola.

La ejecutiva de desarrollo empresarial concluye: “es necesario contar con especialistas que den soporte al desarrollo del país, con los estándares de seguridad y calidad que el sector de la biomasa para fines térmicos y la ciudadanía demandan, de la mano con los cambios tecnológicos y normativos que han ocurrido durante los últimos años. De esta manera, existe consenso en que desarrollar y fortalecer el capital humano será necesario y habilitante para la implementación de las políticas, estrategias y reglamentos asociados a la biomasa para fines energéticos y biocombustibles, pero además es sumamente necesario incorporar las miradas regionales y particularidades que tiene cada territorio dependiendo de las pertinencias territoriales. Para ello, requerimos personas que conozcan, aprendan, se especialicen y elijan trabajar en el sector de la bioenergía”.