El Centro de Negocios Sercotec de Melipilla es el Centro más antiguo operado por Codesser, de manera ininterrumpida desde el año 2013. Fernando Pérez, su coordinador, cuenta cómo ha sido esta trayectoria donde emprendedores y pymes han podido hacer crecer su negocio apoyando el desarrollo regional.
“En pocas palabras, este tiempo ha sido un camino de aprendizajes”, señala Fernando Pérez, coordinador del Centro de Negocios Sercotec Melipilla, operado por Codesser desde el año 2013 y añade que ha sido una etapa donde han ido adquiriendo conocimientos a partir de las demandas de los emprendedores y empresas de la zona: “ha sido un bonito viaje, que nos ha llenado de conocimientos”.
Actualmente, el foco del Centro es generar intervenciones de alto valor, sobre todo con empresas que tengan potencial. “Y cuando hablamos de eso, hablamos de empresas que tengan la sana ambición de crecer y que, por supuesto, también tengan la capacidad de generar mayores y mejores resultados”, añade.
En este tiempo, el rol de Codesser como operador ha sido el apoyar en los procesos administrativos y financieros. Hoy, además, cuentan con una destacada persona en el cargo de Ejecutiva de Desarrollo Empresarial, Daniela Correa. Gracias a su apoyo el Centro en un lugar más estratégico desde la mirada del desarrollo local. En definitiva “Codesser ha tenido un rol fundamental porque ha entendido la conceptualización del modelo como un eje o proyecto que es un catalizador de la economía local”, afirma Fernando.
El coordinador cuenta que un elemento importante a destacar del Centro, es el equipo profesional. “Hemos apostado a la transferencia de conocimiento y hemos logrado mantener la mayor parte del personal, el equipo humano que hace posible el apoyo a las empresas y que estas logren resultados de impacto económico y logren mejorar la economía local de la provincia de Melipilla”.
Para finalizar, Fernando comenta que han tenido muchísimos casos de éxito en este tiempo: “Desde negocios que se reinventaron, que les fue muy mal durante la pandemia y partieron de cero después y ahora son altamente exitosos, a negocios que estuvieron al borde de la quiebra por haber sacado mal sus costos, y que hoy día tienen contratadas más de 10 personas y facturan 30 millones”, señala.
También cuenta que tienen un caso emblemático de una perfumería: “Un emprendimiento melipillano que partió en nuestro cowork y que al principio vendía perfume de autor y empezó a crecer. Los primeros meses vendía 2 millones, 3 millones, y después de 3 meses vendían 20 millones, y después de un año, estuvo vendiendo más de 40-50 millones al mes”.
“Destaco esto: que se puede, que hay negocios súper entretenidos y escalables y son hasta explosivos, eso es super importante”, concluye.